Bruselas – Este año, los Ministros de Gobierno celebraron los logros del Proyecto Fáilte del JRS Irlanda reconociéndolo como un modelo de buenas prácticas para apoyar y mejorar la salud mental y el bienestar de los solicitantes de asilo.

Muchas personas que buscan asilo han sufrido un fuerte trauma en su país de origen y pasado por un peligroso viaje desde su hogar. Por desgracia, el sistema de recepción actual y las importantes limitaciones cotidianas que enfrentan los solicitantes de asilo en Irlanda pueden llegar a convertirse en un obstáculo a la hora de reconstruir sus vidas, recuperar su confianza y volver a participar plenamente en la sociedad.

En respuesta a esta situación, el JRS Irlanda puso en marcha el Proyecto Fáilte, cuyo objetivo es mejorar el bienestar y fomentar la integración de los solicitantes de asilo recién llegados al Centro de Recepción de Balseskin. Desde 2017, el proyecto ha beneficiado a más de un millar personas mediante servicios psicosociales, oportunidades educativas y de capacitación, así como gracias a la gestión de iniciativas de integración. Fátima Mofokeng, una de las beneficiarias del Proyecto Fáilte, explica cómo el proyecto la está ayudando: “Cuando llegué por primera vez a Irlanda, no sabía qué me esperaba ni cómo me recibirían. El Proyecto Fáilte me ayudó a sentirme en casa y a ver que era bienvenida”.

El resultado positivo de la iniciativa del JRS se celebró en enero pasado, durante la presentación de la nueva Estrategia Nacional Intercultural de Salud de la Dirección General de Servicios de Salud. En esta ocasión, el Proyecto Fáilte también fue reconocido como un ejemplo de cómo avanzar en uno de los cinco objetivos clave de la nueva Estrategia, en concreto, el fortalecimiento del trabajo conjunto para mejorar la salud intercultural.

En efecto, la naturaleza colaborativa de este proyecto ha permitido al JRS Irlanda aprovechar los recursos de grupos comunitarios locales, ONG, organismos oficiales y los propios residentes para ofrecer una amplia gama de actividades y apoyos. Los residentes del Centro de Recepción de Balseskin han podido aprender y desarrollar sus habilidades, a la vez que, como voluntarios, aplicaban sus conocimientos entre ellos y en la comunidad.

«El Proyecto Fáilte fue el comienzo de mi historia en Irlanda, pero ahora tengo la esperanza de forjar mi futuro aquí», concluyó Fátima.

Este artículo fue publicado originalmente en http://jrseurope.org