La respuesta global del JRS a la COVID-19

13 marzo 2020|Fr Thomas H. Smolich SJ, JRS International Director 

Mensaje del P. Thomas H. Smolich SJ, Director Internacional del JRS

En este momento sin precedentes de la COVID-19, se nos recuerda la importancia de la solidaridad y nos sentimos llamados a actuar de una manera que nos una como comunidad. La propagación de la COVID-19 no tiene límites. El coronavirus está poniendo a prueba gobiernos y personas, y solo acompañándonos unos a otros y trabajando juntos podremos responder a esta difícil situación.

Con su rápida expansión y su futuro incierto, me preocupa cómo el avance de la COVID-19 repercutirá en los millones de personas desplazadas por la fuerza en todo el mundo. Muchos refugiados viven bajo condiciones de vida difíciles y tienen un acceso limitado a la atención sanitaria, lo que los hace especialmente vulnerables a este brote y a sus repercusiones sociales y económicas.

  • ¿Qué significa esto para los refugiados en Italia, cuyas clases de italiano han sido canceladas, el reparto de alimentos limitado y la esperanza de encontrar un trabajo se hizo más difícil?
  • Con los informes de la COVID-19 procedentes de Irak, ¿qué supondrá esto para las personas desplazadas que se preparan para una enorme tormenta allí este fin de semana, con vientos de hasta 100 km/h y lluvias torrenciales?

Presente en todo el mundo y con proyectos en 56 países, el JRS está siguiendo muy de cerca la situación para garantizar el bienestar de aquellos a quienes acompañamos así como de nuestro personal, y para continuar las operaciones donde sea posible, tanto como sea posible. Estamos tomando las medidas adecuadas para abordar las necesidades inmediatas y la situación actual. Estas incluyen:

  • Nuestro personal de seguridad global está proporcionando información periódica, así como instrucciones de higiene y prácticas grupales para evitar la propagación de la COVID-19;
  • El personal de las oficinas en Europa, EE.UU. y Oriente Medio han pasado a trabajar desde sus casas;
  • Las reuniones y los viajes se han pospuesto o cancelado según las necesidades;
  • Se ha pedido al personal que siga todos las regulaciones y normas locales con respecto a las actividades públicas y a las limitaciones de movimiento.

La COVID-19 es una realidad complicada, cambiante y desafiante. Muchos refugiados han vivido situaciones de emergencia y son particularmente vulnerables en este momento. Más que nunca, en el JRS estamos comprometidos con nuestra misión de acompañar, servir y defender a los desplazados forzosos. Mantengámonos unidos como una comunidad global para cuidar de los más vulnerables y, así, cuidar de nuestro mundo y de nosotros mismos.

Ayúdanos a responder al CVODI-19